El compromiso educativo del filósofo, según Pierre Hadot

Resumo

El historiador y filósofo Pierre Hadot (1922-2010) defiende una concepción de la filosofía entendida como una forma de vida y ejercicio espiritual que, según él, implica para el filósofo un compromiso educativo en relación con las demás personas. Para él, en la antigüedad la filosofía era (y, tal vez, hoy debería volver a serlo) una actividad encaminada no solo al desarrollo teórico y conceptual, sino sobre todo a la transformación de la propia existencia bajo la coordenada de un ideal de buena vida o sabiduría. Pero la dedicación del filósofo a su propia mejora existencial no conduce a una actitud de ensimismamiento egoísta, porque, en la medida en que implica precisamente la superación del egoísmo, provoca una apertura hacia los demás. Esta preocupación por los demás se configura como un compromiso educativo del filósofo en relación con los demás. Sin embargo, a diferencia de la forma en que se enseña la filosofía hoy en día, es una enseñanza que no se reduce a teoría y conceptos, sino que también requiere una implicación práctica y una modificación concreta de la vida.