Publicado 2021-06-02
Palabras clave
- Masacre genocida, Violencia caciquil; Desaparición forzada; Guerra de baja intensidad; México; Guerrero
Cómo citar
Resumen
En este artículo se aborda la ejecución de la masacre genocida contra los campesinos en Aguas Blancas, integrantes de la Organización Campesina Sierra del Sur (OCSS). Creada en 1994, en la región de Atoyac y Tepetixtla, promovió la defensa de los bosques y la presentación con vida de las personas desaparecidas durante la década del setenta. La complejidad de este acontecimiento muestra la práctica de viejas formas de represión: desaparición forzada, ejecuciones extrajudiciales aderezadas con la violencia caciquil en una guerra de baja intensidad (GBI) que se centró en la infiltración de las estructuras judiciales, el control de los medios de comunicación, la vigilancia y el asedio contra organizaciones disidentes. La desaparición forzada del vocero de la OCSS, Gilberto Romero Vázquez, en mayo de 1995, es una muestra de esta estrategia recurrente del Estado. La legitimidad de la organización con su participación en las elecciones locales de 1996, provocó su acoso. La amplia movilización campesina, exasperó al gobierno estatal desplegando su poder represivo mediante la masacre de 17 campesinos. Además, los asesinatos extrajudiciales de los dirigentes de la OCSS, Carlos y Rocío Mesino Mesino, ejemplifican una impunidad estructural que inició en el México contemporáneo de mediados del siglo XX y no han sido resueltos.