La
historia
como
hazaña
por
la
libertad
José Pedro Barrán Montaldo nació en Fray Bentos el 26 de febrero de 1934. Su
infancia transcurrió en una estancia rural en Paysandú, donde vivió hasta los
ocho años, cuando se mudó con su familia a Montevideo. Al igual que su
hermana Teresa recibió formación católica, aunque fue agnóstico la mayor parte
de su vida. Provenía de una familia acomodada, pero los problemas económicos
lo llevaron a trabajar como cadete de oficina en una empresa belga desde los 15
años. Cursó primaria en la escuela República Argentina, secundaria en el liceo
Zorrilla y preparatorios en el liceo nocturno, donde por primera vez tomó
contacto con ideas de izquierda. Ingresó en 1953 al recientemente creado
Instituto de Profesores Artigas (IPA), de donde egresó como docente de Historia
en 1958 para trabajar en la Enseñanza Secundaria.
En su adolescencia practicó natación en las piscinas abiertas de Trouville y, como
socio del club de la Guardia Nueva, se volvió un apasionado del tango y más tarde
de la música clásica. Sus amigos recuerdan la asiduidad con la que concurría a los
cines y teatros de Montevideo en los años cincuenta y sesenta, así como su afición
por las librerías y la lectura de Marcha.
Entre 1960 y 1964, trabajó junto al historiador Juan Pivel Devoto, director del
Museo Histórico Nacional y a quien consideraba su gran maestro. Lo hizo junto a
Benjamín Nahum, relevando documentos de la historia económica de
los siglos XVIII y XIX preservados en el Archivo General de la Nación.
Barrán y Nahum publicaron su primera obra conjunta, Bases
económicas de la revolución artiguista, en 1964.
Durante la década de 1960 escribió reseñas y críticas historiográficas
en el semanario Marcha e integró el grupo de trabajo Historia y
presente, junto a los historiadores Blanca París, Juan Antonio Oddone,
Roque Faraone, Lucía Sala y Julio Rodríguez, entre otros. En ese
contexto, Barrán y Nahum profundizaron en la
historia económica y entre 1967 y 1978 publicaron los
siete tomos de la voluminosa Historia rural del
Uruguay moderno.
A fines de los sesenta, conoció a Alicia Casas en el
departamento de investigaciones de la Biblioteca
Nacional, con quien se casó y tuvieron
a su hijo Pedro.
La dictadura lo destituyó de todos sus
cargos públicos en 1978 y le prohibió
trabajar en la enseñanza privada. En
ese contexto se dedicó a dar clases
particulares en su casa e ingresó,
junto a Nahum, al Centro de
Todas las fotografías son el del libro Epílogos y legados. Escritos inéditos, testimonios, Editorial Banda Oriental,
Montevideo, 2010: José Pedro con su madre, 1935 | En el día de su primera comunión, 12 de diciembre de 1942 | Con
El Morrongo, que vivió con ellos 25 años, 1993 | Con Alicia, su esposa, en Las Flores, 1984 | Con Pedro, su hijo, en las
Torres
Gemelas,
en
Nueva
York,
1996